jueves, 10 de noviembre de 2016

Aprendiste a usar traje y corbata. Aprendiste a usar vestido y zapatos de tacón. Aprendiste a decir "Perdón, Por favor y Gracias." Aprendiste, más adelante, a expresarlos sin sentirlos. Aprendiste a nunca conformarte con el dinero que ganas. Y así aprendiste a ser conformista para ganarla, metiéndote en una oficina a trabajar más horas de las que vives.
Aprendiste a mentir, y a tenerle miedo a la verdad. Aprendiste a ser educado, correcto, formal. Aprendiste a masticar con la boca cerrada y el perfecto uso de los cubiertos. Aprendiste a mantener el control. Te olvidaste de que, a veces, se llega más lejos cuando el control se pierde. Aprendiste a desconfiar de las personas, aprendiste a usarlas. Aprendiste a querer a alguien que no te quiere, y a despreciar al que si lo hace.
Nadie te enseñó a llorar, te salió solo. Pero aprendiste a tragarte hasta la última lágrima. Por orgullo, por vergüenza, por idiota.
Aprendiste que los amigos son importantes, y que siempre están. También aprendiste a cambiarlos por el amor de turno. Quizás te llegó el mensaje de las sociedad que está mal visto estar solo. Aprendiste que estar solo es tomado como un fracaso directamente proporcional a los años que tienes. 
Aprendiste a usar máscaras. No te diste cuenta de que incluso con una máscara puesta todo el día, se te siguen viendo los ojos, y en lo ojos, está el alma.
Aprendiste a sumar, a restar, un poco a dividir: Lo tuyo es tuyo, lo mío es mío, y los que no tienen que repartir, que se jodan.
Aprendiste a decir que si por compromiso. Aprendiste a ver el resultado y no el esfuerzo. Aprendiste la resignación, el hastío y la comodidad. Aprendiste a drogarte y emborracharte para escapar de todo lo que aprendiste.
Aprendiste a dormir mal, a comer mal, a sentirte vacío. Aprendiste a no saber por qué. Aprendiste a taparlo con cualquier cosa. Aprendiste también que no se tapa.
Aprendiste a intentar cumplir las expectativas de los otros.
Tira los manuales de "Las cosas que tengo que hacer según  este mundo". Los tomos que tengas, de verdad, no hacen falta. Sácate ese traje y la corbata. Sácate el vestido y los tacones. Quema la máscara y te invito que aprendas a reinventarte.

lunes, 7 de noviembre de 2016

No le dije nada porque, ¿qué se le dice a alguien que se va y te deja tan desordenado el corazón?

jueves, 3 de noviembre de 2016

Todo el tiempo estoy sintiendo que se me acaba el tiempo, no sé para qué, pero se me acaba el tiempo.